Cátedra de Gerencia de Construcción.

CATEDRA DE GERENCIA DE LA CONSTRUCCIÓN.Convenio entre la Unimet y la Cámara Venezolana de la Construcción, desde 1999. Blog de la Cátedra, como web informativa, y lugar de intercambio de conocimiento, opinión y trabajo colaborativo.

sábado, 12 de marzo de 2011

Álvaro Sucre Fagre

VIVIENDA. Sector informal
(Áreas urbanas no controladas)
Retos y realidades
Relator: Alfredo Rondon



Durante la revolución industrial se produjo un éxodo campesino a los centros urbanos, ya que era en estos donde había más oportunidades de empleo para sustentar a las nuevas familias que se formaban.
En Venezuela el éxodo campesino se ve obligado a movilizarse a las principales ciudades del país gracias a la aparición del petróleo, esta movilización masiva hizo que las personas se acomodaran en lugares fuera del ordenamiento urbanístico de la ciudad; todo ello por razones económicas.

Existen varios antecedentes a la situación de las viviendas informales, siendo el problema económico uno de ellos, éste causo un conflicto social ya que debido al éxodo campesino que hubo hacia las ciudades, se agotaban las fuentes de trabajo, lo cual conllevó a un desgaste del poder adquisitivo de estas personas. Siendo la vivienda el principal patrimonio de la familia, necesaria para la estabilidad y los valores familiares, esta se ve comprometida por la dificultad en el acceso a créditos de compra, los bajos salarios percibidos por el grupo familiar y los altos costos de las propiedades.

En consecuencia, el hacinamiento de la población en los cerros cercanos a las ciudades, conlleva a una vida en condiciones precarias, sufriendo un constante desgaste de los valores y por ende promoviendo la promiscuidad y la criminalidad. Con intervención improvisada y sin la asistencia técnica necesaria es que se han construido miles de hogares, los cuales se han multiplicado en el tiempo, tomando áreas de terreno vulnerables y con riesgos geológicos por su topografía, lo cual ha ocasionado deslizamientos del terreno debido a las lluvias constantes.

La comparación de los datos censales de 1990 al 2001 aporta que un 57% de las construcciones realizadas pertenecen al área informal. Ante esta situación los gobiernos han promovido programas sociales de vivienda y beneficios especiales, pero estos no llegan a las personas que en realidad los necesitan, lo que ha generado un déficit de viviendas acumulado que para el año 2010 estaba por el orden de las 1.900.000 viviendas, que se dividen en 1.170.000 viviendas en déficit funcional, las cuales corresponden a familias que no poseen viviendas, y 730.000 viviendas en déficit estructural, las cuales son aquellas viviendas que están clasificadas como inaceptables.

El problema que acá se presenta no es el déficit de viviendas, sino el déficit de condiciones para que la gente pueda acceder a un alojamiento apropiado, por ende surge el dilema de la construcción de nuevas unidades habitacionales y/o la habilitación de las zonas informales.
Para la creación de nuevas viviendas se ha impulsado la vivienda autoproducida, lo cual implica la autogestión y la autoconstrucción. Existen varios programas impulsando la vivienda autoproducida pero los requerimientos legales, financieros y habitacionales para que estos programas se realicen con éxito son actualmente inalcanzables.

En la habilitación de zonas informales es necesario considerar tres factores importantes, siendo el primero la tierra, siendo necesaria la aplicación de la ley de regularización de la tendencia de la tierra, el catastro y el establecimiento de los condominios; la vivienda por otro lado deberá ser, sustituida, mejorada y reubicada. Y por último los servicios, lo cual seria una intervención directa del estado creando consorcios sociales, en donde se agruparían el sector publico, el sector privado, las organizaciones no gubernamentales (ONG) y las comunidades.

Se podrían establecer unos factores claves de una política de vivienda en Venezuela, dentro de las que estarían las políticas claras, una política de desarrollo urbano que permita el rescate de zonas subutilizadas en las ciudades, la rehabilitación de los barrios estables, mejorar las fuentes de financiamiento, entre otras.

Analizando toda esta problemática, se han organizado varias propuestas especificas como seria la fluidez de los recursos financieros, instrumentando el subsidio habitacional, haciendo programas de microcréditos para el mejoramiento de viviendas; Creando e implementando el Consejo Nacional de la Vivienda, con la finalidad de coordinar los distintos entes relacionados al sector vivienda, y la Reinvención del MinVih, estimulando el alquiler de viviendas, creando una taquilla única para tramitar todos los permisos necesarios para la construcción en un mismo lugar e implementando programas de viviendas de desarrollo progresivo como el Hogar Semilla.

Finalmente se podría citar una reflexión de Arturo Úslar Pietri, titulado “O ranchos, o desarrollos” que 37 años después siguen vigentes.

NO BASTA CON VIVIENDAS
Algunos de manera simplista piensan que este es un problema de vivienda, que se resuelve construyendo habitaciones. Claro que es un problema de vivienda y que lo primero que habría que resolver es ese problema de gente que vive hacinada en un cajón de tablas, sin servicios higiénicos, sin agua, sin calles, sin cloacas, en la mayor insalubridad que no solamente los amenaza a ellos, sino a toda la ciudad”

“En esa zona no-urbana que rodea a Caracas, se está desarrollando un estilo de vida … Es una forma de asociación caótica, insalubre, que favorece la promiscuidad y el delito … Sin espacio, sin orden, sin ley, en hacinamiento inorgánico y destructivo, en perpetua situación de autodefensa y agresión, atenazados de necesidades … en muchos casos de una formación familiar, abandonados del padre, entregados a los muy limitados recursos y posibilidades de una mujer sola y pobre, cargada de hijos, en una especie de matriarcado anacrónico, centenares de millares de venezolanos se encuentran segregados de los más elementales bienes de una sociedad urbana”.

CON RANCHOS NO HAY DESARROLLO
Hoy, de cuatro habitantes de Caracas uno vive en rancho, pero es posible, si no se encara esta situación para remediarla a fondo y transformarla positivamente, que ese mal social contrario al progreso y a la civilización, aumente continuamente hasta que en diez o quince años más de la mitad de los habitantes de Caracas vivan en semejantes condiciones”.

“Para ese momento Caracas ya no será una ciudad sino un doloroso amontonamiento y, lo que es más grave, la posibilidad de que Venezuela llegue a ser un país desarrollado estará profunda y gravemente comprometida, porque no ha sido capaz de incorporar su población a una forma de vida civilizada. Esto es lo que plantea el rancho, nada más y nada menos”.

“Desgraciadamente nunca se ha encarado este problema con la seriedad debida.”

4 comentarios:

Alfonso Benedetti dijo...

Considero que el Hogar Semilla es una excelente inciativa para combatir contra las viviendas informales, ya que, como dijo el Ing. Sucre,los llamados "ranchos" se puede decir que estan bien contruidos estructuralmente, sin embargo, no cuentan con los servicios básicos (agua y electricidad), por lo que con planes como el del Hogar Semilla poco a poco se pudiera lograr que estas personas poco a poco dejen de vivir informalmente. Un problema que le veo, por ejemplo en barrios de la ciudad capital, es la cantidad de viviendas en muy poca area, sin embargo, tomando como referencia lo que se hizo en Colombia (no recuerdo si fue en Medellín o Cartagena) creo que poco a poco se puede lograr. Aunque, para desarrollar proyectos como el Hogar Semilla,es necesario el apoyo del estado, que lamentablemente, por tratarse del sector privado de la contrucción, no se cuenta.

Unknown dijo...

La idea del hogar semilla me parece un muy buena idea, el concepto de que los dueños de las casas sean los que la terminen de construir y personalicen de acuerdo a su gusto me parece excelente porque así les dan la sensación de pertenecía. La ventajas que tienen estas casa en cuanto a lo económicas que son y lo fácil de construir daría a pensar que llamaría la atención del gobierno para adoptarla como parte de la solución de la vivienda pero lamentablemente no produjo esa reacción en el ejecutivo que con la correcta administración podría ayudar a resolver parte del problema de la vivienda. Todo esto se debe también a la constante guerra que tiene el ejecutivo con el sector privado que muchas veces es ignorado por diferencias políticas con el mismo.

Camila Perez dijo...

Al igual que mis compañeros la idea del Hogar Semilla parece tener la solución al déficit de viviendas que tiene Venezuela en estos momentos. Sin embargo, lo que hay que evaluar es si las personas que están en Petare están dispuestos a mudarse a mejores espacios pero más alejados de la ciudad. Muchas personas ya sienten a su rancho como un hogar al que le han puesto mucho esfuerzo para que vaya creciendo, y la idea de pasarse a otra casa y empezar de cero puede resultar una idea muy poco atractiva.

Cuando terminó la clase me acerque al ingeniero a preguntarle como sería la responsabilidad legal que tiene que asumir un ingeniero que se meta en el barrio a restaurar las estructuras. Su respuesta fue que tiene la misma responsabilidad de que el ingeniero haga tiene la misma responsabilidad de 10 años que cualquier otro ingeniero en cualquier otra obra. Por lo tanto es un trabajo un poco complicado, porque no es sencillo meterse a restaurar casas que no tienen ningún tipo de estudio y que posiblemente una vez que hagas algo, el propietario va a seguir construyendo sin tener precaución de lo que hace. Sin embargo si algo ocurre, uno siempre trata de responsabilizar a otro. En fin, no es una rama fácil de la ingeniería civil.

Unknown dijo...

El hogar semilla es una propuesta que a mi parecer es la mas acertada para disminuir el alto de deficit de viviendas que tenemos acumulado actualmente, opino que en medida que esta propuesta se siga haciendo en lugares como el mostrado en la presentacion,esta idea alcanzara la importancia que tiene y se vera en serio colaborativo que es para mejorar la mala situacion de sector vivienda por el cual esta pasando Venezuela y a su vez colaborando a disminuir el sector de viviendas informales.