LA VIVIENDA EN VENEZUELA
MARCO LEGAL Y SITUACIÓN DEL SECTOR
Relator: Ma Fernanda García
El déficit habitacional en Venezuela es un fenómeno que ha existido durante casi todos los años de vida republicana, ya son millones de venezolanos los que no cuentan con una vivienda digna. En la actualidad, un 80% de la población venezolana requiere de subsidio habitacional, y lo más preocupante es que este porcentaje seguirá aumentando como ha sucedido desde hace un tiempo.
Desde el año 1959 hasta el 1968, el número de viviendas por cada 1000 habitantes era de 2,88. Esta cantidad fue incrementando entre el año 1969 y 1978 a 5,30, sin embargo, a partir del 1979 se puede decir que la construcción de viviendas ha venido decreciendo progresivamente, tanto que para el año 2010 sólo se tienen 1,76 viviendas por cada 1000 habitantes.
Esto ha creado un déficit habitacional de más de 2 millones de viviendas, y se puede decir que para cubrir este déficit se necesitan aproximadamente de 27 años, si se construyen un promedio de 200.000/año, lo cual es casi imposible si seguimos por el camino que vamos.
Una de las principales causas de esta situación, se basa en un mal planteamiento de políticas de estado. Se puede considerar que la Ley de Vivienda ha incrementado la posibilidad del Estado de solucionar el problema de las viviendas, principalmente porque los objetivos de ciertas leyes son centralistas, prohíbe a las personas que sean adjudicatarias de las viviendas venderlas, donarlas, alquilarlas cederlas o constituir hipoteca, además permite ocupaciones y expropiaciones de terrenos e inmuebles residenciales o no residenciales sin cumplir con Ley de Expropiaciones por Causa de Utilidad Pública o Social, entre otras observaciones donde se puede observar que su impacto en el sector de las viviendas es negativo, ya que por ejemplo se hará muy difícil que las personas alquilen o pongan en alquiler algunas de sus viviendas ya que no les conviene. Dentro de este marco legal se tiene;
- Ley del Régimen Prestacional de Vivienda y Hábitat
- Ley de Emergencia para Terrenos y Vivienda
- Ley Especial de Protección al Deudor Hipotecario de Vivienda
- Ley de Regularización y Control de Arrendamiento de Viviendas
- Ley Contra la Estafa Inmobiliaria
Cabe destacar que, dentro de toda esta situación por la que está pasando el país, es sumamente importante actuar y buscar soluciones que puedan mejorar este déficit de viviendas. La Cámara Venezolana de la Construcción tiene una gran propuesta con la finalidad de generar confianza y seguridad jurídica, asignar anualmente al FASP recursos por un monto equivalente al 3% del PIB, producir 200.000 soluciones habitacionales/año que vaya desde lotes con servicios y viviendas de desarrollo progresivo hasta viviendas regulares, entre otras.
Esta propuesta se basa en una vivienda de desarrollo progresivo llamada “Hogar-Semilla”, donde entregan la casa con una pequeña habitación de 9m2, dentro de una parcela de 180m2, dándoles la oportunidad de ir construyendo habitaciones adicionales colocando varios cuartos, sala, comedor, baños, lavandero, despensa, e incluso ofreciéndoles la oportunidad de realizar varios pisos, siempre que esté dentro de la parcela de área mencionada.
Es de gran ayuda, ya que la parcela tendrá una placa de fundación de 75m2 para facilitar todo lo que conlleva la fase inicial del proceso constructivo como realizar estudios de suelo, compactar, colocar las fundaciones, entre otros, así como también tendrá previsiones de servicios para su crecimiento progresivo a través del sistema de autoconstrucción, con la finalidad de que cada beneficiario pueda ampliar su hogar conforme a su crecimiento familiar y sus posibilidades económicas, creando un incentivo al ahorro familiar.
María Fernanda García
6 comentarios:
La situación del sector privado de la construcción en Venezuela se encuentra en un estado crítico, ya que este ha sido golpeado desde hace un poco más de tres quinquenios producto de las políticas de Estado implantadas, las cuales lo único que han generado es exclusión social y déficit laboral que a su vez han originado la represión paulatina de la economía nacional. Es lógico comprender que el crecimiento poblacional en cualquier país vaya incrementándose a una tasa ya sea geométrica o exponencial debido a la tasa de natalidad del país propio y a los adelantos tecnológicos del entorno que hacen que la vida humana se prolongue cada vez más. En consecuencia, el hecho de que la población vaya aumentando en cada país, indica que la producción interna en todos los rubros e industrias debe ser proporcionalmente mayor o igual a este crecimiento para satisfacer las necesidades de la población. Sin embargo, esta ley universal no se cumple actualmente en Venezuela.
Como bien se expuso en la relatoría, hoy por hoy en nuestro país el 80% de los habitantes requiere del subsidio habitacional como medida de solvencia a la crisis económica que se vive. En este sentido y como bien se expuso anteriormente; es el Estado quien debe propiciar las condiciones y oportunidades para la libre y sana competencia de industrias y sectores, sin embargo, este únicamente ha logrado que muchos individuos tengan que dejar sus estudios y demás responsabilidades para solventar las necesidades básicas como el hecho de comer o de tener una vivienda digna y propia; los cuales se consideran como derechos humanos establecidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos ratificada en el año 1948 en la que se insta a cumplir dichos artículos a los países firmantes, entre los cuales destaca Venezuela.
(Continuación...)
Carlos Angarita.
(...Continuación):
El sector construcción genera dos trabajos indirectos por cada actividad directa en una obra civil determinada, por lo que si se reprime cualquier parte de este sector; sea la parte pública o la privada, entonces el país como tal perderá patrimonio humano y económico, ya que muchas persondas dejarán de trabajar y, en efecto, habrá una disminución del flujo monetario nacional, debido a que se generará una exclusión paulatina como la existente hoy en día.
La propuesta ideada por el Ingeniero Jaime Gómez en conjunto con la Cámara Venezolana de la Construcción sin lugar a dudas es un proyecto que busca no solo reforzar dicho flujo monetario en el país, sino que además de eso busca incluir a las personas que se encuentran en una situación económica difícil dentro de la región en la que viven; posibilitándoles tener una vivienda digna que les genere un sentido de permanencia debido a que son estas mismas personas quienes podrán diseñar y proyectar la ampliación de sus hogares por medio del sistema de autoconstrucción. De igual manera, esta propuesta logrará originar más trabajos en los estados y municipios donde se construyan las viviendas, debido a que se tendrán dos trabajos indirectos por cada actividad en el proceso constructivo. Esto hará que dicho sector específico vuelva a recuperarse gradualmente de la crisis económica, por el solo hecho de que las personas que ahí vivan, podrán tener un lugar efectivo donde puedan crecer como familia.
Como bien lo estableció el Ingeniero Jaime Gómez, cada año no solo se deben construir la cantidad de viviendas requeridas en dicho año por la población (para combatir y superar el déficit habitacional), sino que debe hacerse una extrapolación que contemple la tasa de crecimiento poblacional que hace que muchas personas se encuentren sin vivienda digna, ocacionandoles una expulsión del mundo laboral, debido a que no tienen un techo donde vivir lo cual es una de las necesidades básicas del ser humano para poder progresar. Esta última consideración se define como crecimiento vegetativo de la población. Por ello considero que la idea del "Hogar Semilla - La Casa que Crece Contigo" es una excelente propuesta, ya que es un plan que solventará una parte de la crisis social desde el punto de vista humano y de igual modo impulsará la economía del país por el hecho de incluir al sector privado de la construcción tal como lo es la CVC.
Carlos Angarita.
En Venezuela se esta viviendo una situación critica en muchos aspectos, sin duda una de las principales causas (por no decir la principal) es la disminución del valor de la moneda, cada día el dinero le rinde menos a los venezolanos y son los estratos mas bajos los que sufren las consecuencias mas graves, esto sin contar que esos estratos cada día crecen mas.
Uno de los sectores de producción mas afectados ha sido el sector de la construcción, esto se debe a que muchas de las medidas legales y económicas que ha tomado el gobierno han afectado directamente a las empresas de construcción, obligandolas en muchos casos a cesar sus operaciones de manera definitiva o a trasladar sus oficinas y marcas a otros países, trayendo como consecuencia que los proyectos de obras civiles se realicen cada vez en menor grado y esto podemos apreciarlo claramente en el gran déficit de viviendas que se encuentra en estado de aumento en el país, cada día son mas las personas que carecen de un techo propio decente donde vivir, esto traído que el aumento de las llamadas viviendas informales sea cada vez mas alarmante ya que las mismas no cumplen con las normas de construcción Venezolanas, conviritiendolas en un posible desastre en el momento que se presente un sismo. Hay que entender que bajo las condiciones legales actuales, es un riesgo económico para cualquier empresa de construcción dedicarse al mercado de la construcción de viviendas, esto sin contar los elevados precios a los que se deben vender las mismas debido a lo costoso y difícil que es conseguir la materia prima. Esta claro entonces que si se quiere poder, aunque sea empezar a solucionar el problema de la vivienda en Venezuela es necesario que el gobierno ajuste varias de sus políticas actuales de manera que, tanto el constructor como el propietario se vean beneficiados y protegidos, claro esta, estas políticas tienen que ser acordes a la realidad país que se esta viviendo.
Es evidente que Venezuela actualmente está atravesando una situación económica crítica que sin duda se ve reflejada en el sector construcción. Como bien se dijo en la relatoría, más del 80% de la población venezolana reside en viviendas informales, las cuales no cuentan con las características de una vivienda digna. Entre los problemas más comunes que se tienen en dichas viviendas son el hacinamiento, instalaciones precarias de agua potable y aguas servidas, la ausencia de características sismorresistentes en los elementos estructurales, entre otros.
La construcción de viviendas en los últimos años ha decaído, en gran parte esto es consecuencia de leyes que entorpecen a la construcción, como lo es la "Ley contra la estafa inmobiliaria" o las bien llamadas expropiaciones. Debido al actual marco legal con respecto a las viviendas, son muchas las empresas que han decidido apartarse de este estrato, sobre todo el sector privado que es el que resulta más perjudicado. Estas leyes han generado a su vez que sean menos las personas que deseen invertir en bienes inmuebles, disminuyendo la demanda en el mercado. Como se puede observar, la construcción de viviendas decae mientras que la tasa de crecimiento de la población incrementa, traduciéndose en una mayor cantidad de personas residiendo en viviendas informales.
Por estas razones la CVC propone el "Hogar semilla" como una solución a la problemática actual, permitiendo que parte de la población afectada tenga una casa en buenas condiciones y generando en ellas un sentimiento de pertenencia, todo esto a un costo accesible dado la situación económica. Es de vital importancia que se lleven a cabo más proyectos como este, y es responsabilidad de los ingenieros civiles (en conjunto con el Estado) proponer soluciones que ayuden a solventar la situación actual bajo la cual se encuentra más de la mitad del país, con el fin de construir la Venezuela que todos queremos.
Orlando Chiossone
Es innegable que Venezuela carece de una gran crisis habitacional, así como en otras áreas importantes que cercan y estancan el desarrollo del país. A pesar de que el Estado Venezolano se excuda en el "banderín: de la "Gran Misión Vivienda" que desarrollo como respuesta a la situación crítica del déficit de viviendas, basta con solo pasear por algunos Estados del país, charlar con alguna de las familias que no disponen de viviendas propias o simplemente repasar algunos cifras importantes y se lograra observar esta gran realidad.
La crisis habitacional es una responsabilidad social que recae principalmente en el Estado pero que debe ser manejada y por todos los profesionales que de alguna manera u otra nos estamos formando o están capacitados para resolver con ingenio dicha problemática. Sin embargo considero que, al menos que no exista un plan nacional que ataque directamente el deficit de vivienda integrando a profesionales expertos en la materia, lease ingenieros intengrales de la cámara de construccion, analistas de costos, economistas y demás profesionales capacitados, la situación seguirá igual de crítica. Los números que enfrentamos actualmente simplemente empeoraran.
En mi opinión personal, el Estado Venezolano debe rectificar y dejar de usar el déficit habitacional como un esquema político de paternalismo que se traduce en ganancia polítca y ahondar en la retencion de inversiones privadas que garanticen que exista una descentralizacion. Caracas se encuentra sobrepoblada, lo ideal sería lograr hacer de otros sectores de Venezuela atractivos para el desarrollo de conjuntos habitacionales y para ello debe irse de la mano del desarrollo de industrias que laboren cercanas a dichos territorios, para así garantizar el desarrollo urbano que se busca.
Una vez que Venezuela logre desarrollarse a lo largo y amplio del territorio nacional, garantizaremos un adecuado uso de los terrenos que pueden habilitarse para bajar los indices de deficit habitacional.
Bárbara Valladares
Es lamentable como el sector construcción ha venido cayendo con los distintos cambios de gobierno que hemos tenido, y con esto aumenta la crisis habitacional en el país. La "Gran Misión Vivienda" especula que están acabando con esta crisis, pero la verdad es que con la política aplicada actual es imposible resolverla, dado que existen muchos casos de corrupción como también gente que no esta bien preparada para llevar un proyecto de esta magnitud.
Estas son alguna de las causas que afectan el sector construcción en Venezuela, pero ejecutar la ley contra estafa inmobiliaria no es una solución sino todo lo contrario, ya que puso, a muchos trabajadores honestos, como violadores de la ley solo por no justificar sus precios con la inflación que claramente existe.
El gobierno debería derogar esta ley y permitir de nuevo las licitaciones de las obras, para que el sector construcción pueda surgir de nuevo.
José Doreste
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